Con todo lo que ha sucedido a lo largo de la jornada hace unos meses, una persona podría pensar que las palabras de San Pablo en la segunda lectura pertenecen al 2021, no a mediados de los 50 d.C. Cabe recordar que no estaba escribiendo para asustar a los corintios, sino para animarlos. En estos días de incertidumbre puede haber muchas cosas que nos atemorisan. La mayoría de esas cosas están fuera de nuestro control (nos gusta tener el control, ¿no?). Enfoquense en vivir su fe y pongan en práctica las enseñanzas de Jesús son áreas que podemos controlar. Al hacer eso, ya sea que el mundo presente fallezca o no, estaremos listos para la vida eterna en el cielo.